Por una nueva arquitectura rural
"El rico patrimonio etnográfico leonés sufre también los males del envejecimiento y la despoblación. Aunque todavía queden muchos ejemplos de la arquitectura popular leonesa y de la identidad de cada comarca, el abandono paulatino de los pueblos hace que edificios emblemáticos estén al borde de la desaparición. Bien es verdad que muchos de ellos se han reabierto como casas de cultura o pequeños museos, pero otros –el palacio de los Allende de Burón sería el ejemplo más sangrante– languidecen a medio camino entre la ruina y el olvido. La provincia de León sigue sin contar con unas normas que fomenten la rehabilitación de sus pueblos conforme a unos criterios que eviten la utilización de la pizarra en pueblos con teja árabe o de nuevos materiales en zonas de casas de piedra. No se trata de imponer, sino de sensibilidad para no perder la identidad. Y para eso no sólo las administraciones deben tener sensibilidad. Por eso mismo, la falta de arreglo de los edificios públicos dejan en mala situación a quienes deberían encabezar un movimiento necesario para una provincia como ésta, donde la economía de futuro de buena parte de su medio rural pasa por el turismo. No es que una propuesta sea imposible de cumplir. Ejemplos cercanos existen. Basta mirar para Galicia, Asturias y Cantabria, donde en los últimos años se vienen fomentando planes y actuaciones que embellezcan sus pueblos conforme a un criterio de identificación con lo que ha sido la arquitectura de toda la vida. León sigue en el vagón de cola de muchas iniciativas pese a su gran potencial. Todavía se está a tiempo, pero son las administraciones las que deben dar el primer paso. Por responsabilidad y porque es su obligación."
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