LEÓN: 25 AÑOS DE RECESIÓN

Quintana la Peña, baixu Peñacorada y l´Arcu las Pilas al fondu

Tribuna qu´espublizóu´l "Diario de León" en Avientu y 28, robrada pur Joaquín Cuevas Aller, sobru la despoblación del nuesu País y l´autuación de los poderes políticos.

DIARIO DE LEÓN
Tribuna

León: 25 años de recesión

JOAQUÍN CUEVAS ALLER

"TODOS LOS MEDIOS de comunicación nacionales están haciéndose eco de la recesión que están sufriendo algunos de los países más desarrollados del mundo como Japón, Alemania e Italia entre otros. Los mismos medios hacen especial hincapié en la recesión que está sufriendo España en los últimos meses. Ninguno de esos medios de comunicación ha mencionado que la provincia de León lleva veinticinco años de recesión económica y humana. Por lo visto, lo que sucede en la provincia leonesa no interesa. Año tras año, desde 1983, fecha de la integración de León en Castilla, planificada por los políticos en contra de la voluntad de los ciudadanos y en contra de la legalidad constitucional, el desarrollo de León ha ido retrocediendo en todos los campos. Durante estos 25 años la población ha ido disminuyendo inexorablemente año tras año. Asimismo, todo aquello que representa desarrollo económico ha ido retrocediendo: la agricultura, la ganadería, la minería, los puestos de trabajo, los cotizantes a la seguridad social y un largo etcétera. Sólo ha aumentado el paro y el envejecimiento de la población.

La disparatada e injusta política seguida por la administración autonómica ha cosechado el récord negativo más impresionante en la Historia de España desde la Prehistoria. En estos 25 años León ha retrocedido mil años, devolviéndole a la Edad Media. La vida en el mundo rural es como hace mil años aunque ahora con televisión, pero a cambio, sin niños y muchos ancianos. Y lo peor está aún por llegar; en los próximos años, León seguirá retrocediendo en el tiempo hasta llegar a la Edad Antigua y luego a la Prehistoria. Si en 25 años nos han devuelto a la Edad Media, en los próximos 15 años nos meten de lleno en las cavernas para luego desaparecer. La prueba está ahí a la vista de todos los que lo quieran ver: Cientos de pueblos leoneses han perdido en estos últimos años más del 60% de su población; bastantes, más del 70%; y otros muchos, más del 80%. Entre los años 2020 y 2025 habrán retrocedido a la Prehistoria cientos de pueblos o habrán desaparecido.

Es muy fácil comprobar la realidad de mis palabras, basta comprobar la estadística poblacional de la mayor parte de los pueblos de todas y cada una de las comarcas leonesas y quedará asombrado. Veamos una simple muestra: San Miguel de Escalada ha pasado en estos últimos años de 298 habitantes a 119 (con una pérdida del 70% de la población). Yugueros, de 343 a 88 (75%). Robledo de Omaña, de 52 a 7 (87%). Antoñán del Valle, de 918 a 202 (78%). Velilla de la Reina, de 703 a 271 (62%). Arbas del Puerto, de 69 a 10 (86%). Matallana de Torío, de 349 a 129 (62%). Grajal de Campos, de 937 a 276 (70%. Estas poblaciones son sólo una muestra de poblaciones con más de mil años de gloriosa Historia entre más de quinientos pueblos de la provincia de León que están en una situación similar a los anteriormente citados.

En este año 2008 se cumple el 25º aniversario de funcionamiento de la Autonomía mal llamada de Castilla y León. Si Dios no pone remedio, al ritmo actual de despoblación, más de quinientos pueblos leoneses no verán el cincuenta, ni siquiera el cuarenta aniversario de la creación de esta Autonomía, pues habrán desaparecido antes.

Desde el año 2000, fecha de mi regreso a esta bendita y sufrida tierra leonesa que me vio nacer, vengo oyendo a diversos políticos que detentan el poder, «la prioridad y urgencia de fijar población en la provincia de León». ¿Se ha hecho algo? No solamente no se ha hecho nada, ni siquiera se ha planificado nada para aliviar el problema. Lo poco que se está planificando es para aliviar el problema a la ciudad de León y otras cuatro «islitas» de población, que es lo que quedará en esta provincia en breve tiempo.

Por ninguna parte aparecen planes realistas y concretos para fijar y mucho menos para recuperar población en el mundo rural. Sin ser economista ni experto en estos temas, pero con la experiencia de conocer prácticamente todas las provincias españolas y muchas de países tan desarrollados como Francia y Alemania, la solución es muy simple. Es absolutamente necesario el estudio de una planificación de todas las comarcas de la provincia, construir unas buenas vías de comunicación, indispensables para alcanzar un auténtico desarrollo económico, crear una red de industrias básicas con especial atención a la industria de la alimentación. Estos planes comarcales son la única forma de lograr un desarrollo económico, equilibrar toda la provincia y además facilitaría el desarrollo de unos planes locales. Querer planificar únicamente el desarrollo de la ciudad de León como si fuese la panacea de desarrollo provincial es tan perjudicial o más que el centralismo pucelano que padecemos actualmente. La falta de una planificación comarcal y local es la causa fundamental de la recesión de la provincia de León y de sus consecuencias como la despoblación y envejecimiento.

Los políticos leoneses son los máximos responsables de la situación creada y sufrida que padece esta provincia. El pueblo vota a unos políticos para que defiendan los intereses de todos los ciudadanos, pero no ha sido así, han primado más los intereses personales. A nadie debe extrañar que luego les llamen pesebreros y siervos de Pucela."