miércoles, 19 de marzo de 2008

DOUS ARTÍCULOS D´AYERI

Hoy traemos a colación dos artículos de Diario de León de ayer, que tratan del tema de la resaca postelectoral, que ya empieza a dar sus coletazos; desde la guerra del agua con Palencia (que salió a la palestra sólo 48h después de cerrarse las urnas), pasando por la Sama-Velilla (había mucho que matizar tras los excesos de la campaña) y ya lo último, el descarado engaño del mando de control de la alta velocidad del noroeste, que es un ejemplo más de la tomadura de pelo que los grandes partidos gastan con el País Leonés, con el apoyo reiterado de los crédulos votantes, que cada cuatro años pican. Mientras tanto ZP deberá negociar con las minorías inteligentes a cambio de tajadas que se caen de nuestra mesa.

NOTA: Las negritas y los paréntesis van por cuenta de L´ASTIELLA




DIARIO DE LEÓN

LEÓN Y VALLADOLID, POLOS DIVERGENTES
EL CORRO

LOS RESULTADOS del 9-M han consolidado la existencia del fortín socialista leonés en el seno de una comunidad autónoma fiel al Partido Popular en las ocho provincias restantes. Por muchas dudas que hubieran introducido las encuestas, era algo bastante previsible. La posibilidad de que el partido del presidente Zapatero perdiera en León unas elecciones que ya había ganado en el 2004 desafiaba toda lógica política.

Pero el hecho de que el efecto Zapatero haya sido determinante para decantar la balanza electoral en León no debiera de servir de excusa para ocultar la cuota de responsabilidad del PP en su propia derrota. Y no me refiero tanto al mismo PP leonés y a su atropellada presidenta, o a su desgastado número uno al Congreso, como a la estrategia seguida respecto a León desde la dirección regional (??!) del partido.

Mientras que, de la mano de Zapatero, el ejecutivo central ha sido percibido en León como un Gobierno cercano, comprometido en sacar a la provincia de su postración económica, la mayoría de los leoneses siguen(??!) sin sentir la Junta como algo propio y la asocian al centralismo vallisoletano. A esta percepción contribuye no sólo la ubicación en Valladolid de las principales autonómicas, sino sobre todo la composición territorial de las mismas, especialmente del ejecutivo regional. ¿Cómo no va a ser percibido así un gobierno como el de Juan Vicente Herrera, en el que se cuentan hasta cinco consejeros extraídos del PP de Valladolid por tan solo uno procedente de León?

No es casual que el espaldarazo electoral del PSOE de León haya coincidido con un avance no menos espectacular del PP de Valladolid, que, preside, tampoco por casualidad, el vicepresidente y consejero de Economía, Tomás Villanueva. Que cada cual saque sus conclusiones.

Tras su victoria en las autonómicas del 2008, Juan Vicente Herrera tuvo ocasión de contrarrestar el efecto Zapatero potenciando la presencia leonesa en la Junta. Además de conveniente para los intereses de su propio partido, lo demandada el equilibrio político-territorial de la comunidad. Pero incomprensiblemente no lo hizo. Incluso actuó en sentido contrario, restando protagonismo al Antonio Silván, el único leonés con cartera en el gobierno regional. Por si fuera poco, llegada la reforma del Estatuto a su fase final, el propio Herrera fue del todo intransigente ante las enmiendas leonesistas planteadas a última hora desde el PSOE(???) de León. Una intransigencia que tampoco le reportó al PP precisamente simpatías entre el electorado leonesista. El PP no puede por tanto eludir su responsabilidad en el fracaso electoral cosechado en León. Y de no corregir urgentemente el rumbo, corre el riesgo de seguir retrocediendo posiciones a medida de que Zapatero vaya convirtiendo sus promesas en realidades más o menos tangibles. Por su parte, los socialistas leoneses tendrán que decidir qué papel y estrategia adoptan respecto al conjunto de la comunidad autónoma. Si asumen, desde su hegemonía orgánica y respaldo electoral, el liderazgo del PSOE de Castilla y León, o si, por el contrario, se desentienden de ese compromiso y endosan a un socialista perdedor el marrón de reemplazar a Ángel Villalba.


ALMENAS VIGILADAS POR LEONES

TRIBUNA POLÍTICA | DESDE EL RUBICÓN
F. RAMOS
http://www.diariodeleon.es/se_sumario/noticia.jsp?CAT=111&TEXTO=6662914

Quienes siguen tapados y callados son los críticos del PP. Existen y se conocen, pero ellos prefieren callar para no meter la pata como ya hicieran en mayo-junio del 2007

La paz de los votos se ha instalado en el PSOE de León. Y es que una diferencia histórica con el PP permite sacar pecho a todos, incluso a aquellos que hicieron algún que otro mérito desde dentro para tratar que esta diferencia no fuera tal. ¿Y ahora qué? A esperar, que la decisión sobre lo que va a suceder en el PSOE de León todo el mundo sabe dependerá de lo que diga el presidente Zapatero y éste, ahora, está a lo suyo: reordenar el mapa ministerial, que a pesar de lo dicho por muchos él ya tiene suficientemente claro, aunque lo anunciará en tiempo y forma. Los resultados electorales han venido a corroborar lo que ya se sabía: León no es Castilla y Castilla, por supuesto, no es León, pese al empeño que han puesto y siguen poniendo aquellos que tratan de juntar algo que no pega ni con superglú. Ni siquiera el discurso es el mismo en tierras castellanas y leonesas, algo que aún no han aprendido en la dirección castellana del PSOE. Por eso, y pese a las diferencias y sectores críticos de uno y otro lado, en el seno del PSOE leonés todos están de acuerdo en una y solo en una cosa: las almenas castellanas del PSOE estarán vigiladas por leones. O lo que es lo mismo: el peso del PSOE de León en la dirección autonómica será aún mayor, eso sí, sin ostentación y sin necesidad de nombrar al secretario autonómico, que para lo que sirve... Y es que el nominado no tiene que ser de León, porque así cuando haya que dar leña al muñeco no tendrán que reprimirse como hasta ahora.

Los que no se atreven a salir y darle al muñeco son los críticos del PP que los hay y se conocen, pero no quieren volver a meter la pata como en mayo-junio del 2007. Ahora callan y lanzan a secundarios.


No hay comentarios: