Diario de León
Mi repulsa absoluta al fascismo
Abel Pardo Fernández
El verano del año pasado visité el Campo de Extermino de Auschwitz, en la actual Polonia. Para llegar al mismo desde Cracovia hay que recorrer varios kilómetros en coche por unas carreteras en un pésimo estado, con escasas indicaciones y a través de unos parajes escabrosos. La llegada a Auschwitz se hace de improviso, observando tan sólo unos muros con alambradas que en nada indican lo que puede contener su interior. Una vez allí, la entrada muestra unos raíles casi imperceptibles y un edificio donde se exponen los planos del campo. La entrada, libre, sólo requiere silencio, un silencio que repetidamente se recuerda en cada paso que se da en el campo.
El acceso al recinto es sencillo, casi como sin darnos cuenta. Una vez traspasada la alambrada que recorre la parte interior del recinto, comienzan los barracones donde millones de seres humanos fueron hacinados por el simple hecho de profesar una fe, una ideología, una orientación sexual, o por pertenecer a una determinada etnia. Miles y miles de fotografías nos muestras personas normales; personas como usted, como yo, como cualquiera. Personas normales que fueron sistemáticamente asesinadas por el hecho de profesar una fe, de tener una ideología, una orientación sexual, o por haber nacido. Poco importaba la razón. Estuvieron allí y fueron asesinados. Las caras de estas personas impresionan. Impresionan porque una cosa es narrarlo y otra cosa es verlos; ver a seres humanos que perfectamente pueden ser nuestros vecinos, nuestros parientes, nosotros mismos. Ver en las fotografías la fecha de su entrada en el Campo de Exterminio y la fecha de su muerte. Ver sus gafas, ver sus muletas, ver sus prótesis, ver su pelo. Ver los habitáculos en los que fueron hacinados, ver los puntos desde los que eran fusilados, pero sobretodo, repito, ver sus caras. Ver caras de sorpresa, de espanto, de indignación o de esperanza junto a la fecha de su muerte. Ver horribles habitáculos donde las personas morían de hambre o sed simplemente para comprobar cuánto aguanta un ser humano hasta su muerte por no ingerir líquidos o alimentos. Ver horrible habitáculos donde la gente era amontonada de pie para que no pudieran dormir por la noche. Ver horribles celdas donde el silencio, un sepulcral silencio, sólo era perturbado por la respiración de angustia de quienes allí nos encontrábamos. Auschwitz te cambia la vida. Auschwitz te cambia el modo de ver el mundo. Auschwitz te da argumentos palpables y visuales, aparte de los que toda persona de bien tiene per se simplemente por el hecho de ser humano, para luchar porque aquello, jamás, pueda volver a repetirse. Es espeluznante ver una cámara de gas y un crematorio. Es horrendo ver la línea de tren acercarse a la puerta del Campo de Exterminio. Es sobrecogedor, y difícil, ciertamente difícil, contener el llanto y la indignación.
Cuando estaba en Auschwitz, cuando salí de Auschwitz, sólo un pensamiento inundaba mi mente. Esto no puede volver a repetirse. Y yo, como político, como leonesista, pero sobre todo como persona, me juré a mí mismo que por encima de todo, por encima de la autonomía para León que tanto deseo, por encima de la lengua que tanto defiendo, por encima de cualquier otro ideal, estaba la lucha contra el nazismo en particular y contra los regímenes totalitarios y dictatoriales en general. Dudo mucho que las personas que esta semana han hecho declaraciones grandilocuentes o dado rienda suelta a sus odios a mi persona a través de la pluma hayan estado en Auschwitz. Lo dudo, sinceramente, porque nadie que haya estado allí osaría acusar a otro ser humano de ser complaciente con tales atrocidades simplemente por hacerle daño, porque no está de acuerdo con su ideología o porque cree que la lengua leonesa es una tontería. Hay límites. La política tiene límites. El periodismo, tiene límites. O por lo menos, deben tenerlos. O por lo menos, alguien con juicio, debe hacérselos ver a los demás. Y éste límite, sinceramente, creo que algunos lo han sobrepasado.
Me repugna el nazismo. Un nazismo que estoy seguro me habría puesto un traje a rayas con una estrella por mi ideología leonesista. Un nazismo que estoy seguro me habría puesto un traje a rayas por ser católico. Un nazismo que seguramente me habría puesto un traje a rayas por defender el derecho de León a tener su autonomía y hablar en nuestra propia lengua. Un nazismo que a mí, a Abel Pardo, habría enviado a la cámara de gas por ser un ser inferior, como a mis compañeros, como a mis colaboradores, como a los leoneses, a los españoles y cualquiera que no coincidiera con sus abominables ideales.
Sé que soy una persona controvertida. Sé que algunas de mis actuaciones no gustan. Sé que me consideran radical en mis planteamientos, en mis formas, en mi manera de entender el leonesismo o en mi manera de hacer política. Lo sé, lo asumo y pido sinceramente perdón a quien con ello ofenda. Pero lo que no estoy dispuesto ni por un segundo es a tolerar es que nadie siembre la duda sobre que condeno con todas mis fuerzas esos atroces crímenes contra la humanidad que se cometieron, aunque fuera con una sola persona. Es igual de abominable. Hasta ahí no estoy dispuesto a llegar.
No sólo no estoy dispuesto a ello, sino que dedicaré mi vida a luchar contra el fascismo, contra el totalitarismo y contra todas las dictaduras que impiden que los seres humanos sean libres y tengan derecho a pensar, a creer, a vivir, en libertad. Y poner en tela de juicio tales creencias, intentar hacerme daño políticamente con un tema tan abominable como este, simplemente merece mi repugnancia más absoluta. No todo vale en política, y menos, utilizar la memoria el dolor y la vida de millones de seres humanos para atacarme. Ello es indignante para quien lo hace y repulsivo para cualquier persona de bien.
9 comentarios:
Si tuviera repulsa hacia el nazismo no habría permitido bajo ningún concepto que ese contenido neonazi minimizador del holocausto se difundiera en la Llionpedia. Es más, el responsable de ese contenido neonazi que minimiza la barbarie nazi (contenido neonazi no penado en el estado español) fue el primer administrador de la Llionpedia con poder de decisión. Es decir, o es él o es alguien de su círculo. Abel Pardo es el máximo responsable político de este escándalo como de la difusión, permisividad como complicidad y encubrimiento. 'auslli' igualmente estaba registrado en la wikipedia italiana que expulsaron por duplicidad de nicks ya que escribía también como 'conceyeiru'. Hay que recordar que Abel Pardo tiene conocimientos de italiano y 'auslli' o 'conceyeiru' es el autor de la biografía de Abel Pardo en italiano.
¿Qué margen hay a la duda?.
La fiscalía archivó el caso porque no es constitutivo de delito, según la legislación española, la minimización del holocausto. En otros estados como Alemania es constitutivo de delito. La minimización del holocausto es contenido neonazi igualmente de esos mismos escritores neonazis que justifican el holocausto. La minimización del holocausto es la estrategia que siguen los nazis en el estado español para difundir contenido neonazi sin ser juzgados por ello.
Las palabras de rechazo al nazismo de Abel Pardo se las lleva el viento; no es más que verborrea para camelar a la opinión pública como lo de la asociación judia sefardí.
Menudo ejercicio de asqueroso cinismo. Vomitivo.
No sé cómo todavía hay gente que defiende a Abel Pardo cuando está claro que él es el último responsable directo de la aparición de ese contenido negacionista minimizador de la barbarie del holocausto en la Llionpedia. REPITO: no es algo casual ya que el primer administrador del foro con capacidad de decisión que. SABE ITALIANO, colgó ese contenido neonazi.
¡¡No sé cómo todavía hay gente de los que os quejábais de esa identificación del leonesismo con el nazismo podéis defender al responsable de ese hecho!. los responsables son los que han difundido ese contenido filonazi minimizador del holocausto que según la legislación española, ese contenido filonazi, no es constitutivo de delito
Otra cosa Leñador.
Esa carta la hizo ya cuando no le quedaba otra otro cartucho. Por tanto, ese escrito está muy condicionado como lo de la asociación judía. Si tuvieramente realmente repulsas hacia el nazismo no habría permitido bajo ningún concepto que ese contenido figurase en esa wikipedia y además desvelaría quién es 'auslli' aunque parezca un tanto claro que no es un mindundi ni es alguien ajeno a Conceyu. ¿Quién puede dar órdenes a Adrianu y Xairu, ser el primer administrador y saber el italiano?. ummmm, no se, no se...
Agradéceselo a Abel Pardo el que haya gente que por la calle te diga 'nazi'.
Nota: imagino que cualquier persona con un mínimo sentido común habría denunciado ese contenido filonazi negacionista y minimizador del holocausto.
Dejad ya este tema de la Llionpedia, y de si son galgos o podencos.Los castellanopucelanos nos tienen como a ellos les gusta que estemos,es decir, peleados, cabreados, embobados, ensimismados, debilitados, sin capacidad de respuesta ni de generar ideas y proyectos,mientras ellos se parten de risa de nosotros.¡UNIÓN ENTRE LEONESES YA!
Tou d´alcuerdu dafeichu cuntiéu, Barqueiru. Un saludu
La bestia, los ppsoeperiódicos, siguen queriendo carnaza. Lo que interesa es exterminar el leonesismo. ¿Quién será el proximo en caer?. ¿Qué barbaridad será la siguiente?. No se van a conformar tan facilmente. El problema es que pppsoe son adversarios. El verdadero enemigo está dentro y claro como la presión mediatica es tan grande, echaron la lengua a pacer antes de tiempo y el tiempo pondrá a cada uno en su lugar.
Añadiré algo más.
Si hubiera leonesismo en vez de haber tanto 'antipucelanismo' otro gallo nos cantaría. Es injusto y desproporcionado que haya leonesistas que enfoquen sus iras contra los pucelanos y pucelanas cuando los responsables son el PP y el PSOE (principalmente partidos estatales que gobiernan) tanto en el País Llionés como en Castilla como en Madrid. Son esos partidos responsables. No es el 'Partido Pucelano' (PP); cada uno hace su trabajo. Esta cc.aa existe porque desde el PP y PSOE de Génova y Ferraz así lo quieren. Unas razones de estado que siguen ahí.
Los responsables del centralismo económico no es el dependiente de un kiosco pucelano por ser pucelano sino unos intereses económicos que están detrás de ese centralismo que no se da así por así; es decir, los que se enriquecen directamente de esta situación de centralismo y están detrás de los poderes políticos como un lobbi para enriquecerse. Pasa lo mismo que los países pobres y ricos. Imaginad que los ciudadanos de los países pobres culpasen a un leonés de a pie por la desigualdad económica existente entre unos países y otros. No tenemos nosotros culpa de esa situación de injusticia; quienes tienen culpa son esos que crean desigualdad, pobreza y en algunos caso miseria.
Si los leoneses nos hubieramos sentido muy leoneses (más leoneses que españoles) en todas las provincias leonesas muy seguramente el debenir sería muy distinto; pero el que la gente tenga esa desidia y pusilanimidad no es 'la forma de ser de los leoneses' como hay leoneses que apuntan; sino una total mediatización del pueblo leonés desde Madrid. Si la gente pensara un poco (solo digo un poco) por el País Llionés en vez de tanto ¡¡España!! nos iría muchísimo mejor.
¡¡UNIÓN ENTRE LOS LEONESES!!.
¿Pero no ha estado unido el LEONESISMO SOCIAL mientras los politiquillos de la UPL que no dan más que de hablar ponían palos a las ruedas?.
¿Pero cuál es el problema; el leonesismo social (que lucha) o los políticos de la UPL que sólo se conoce de ellos cuando están en los titulares de los periódicos por escándalos: si no es Otero es Rubinat; si no es Rubinat es Chamorro y sino Pardo o Monero. ¿Pero a qué tipo de unidad nos referimos a seguir a la UPL todo el leonesismo cuando la UPL no ha hecho más que parasitar y obstaculizar?. Cuando la UPL está GOBERNANDO y lo que vemos es que en pocos casos ha hecho algo reseñable. ¿A qué unidad nos referimos?. Precisamente el leonesismo social fue el revulsivo dentro del leonesismo cuando empezó algo a funcionar al margen de esa panda de aburguesados político-mercenarios. Precisamente el que existan más voces dentro del leonesismo y enriquezcan el leonesismo hace más grande la lucha por la libertad de este pueblo. Así que no nos equivoquemos....estos políticos de la UPL ellos solos se marcan su camino. Ahora, el leonesismo social hay que entenderlo como algo autónomo y con vida propia no como satélite de ningún partido.
Publicar un comentario